Un componente líquido en la estructura y una capacidad para regular la entrada de radiación solar y minimizar así el costo de la climatización, son las principales características del modelo de “ventana inteligente líquida” ideado por investigadores de la Universidad Tecnológica Nanyang (NTU) de Singapur. Se trata de una mezcla de microhidrogel, agua y un estabilizador, y descubrieron, a través de experimentos y simulaciones, que podría reducir eficazmente el consumo de energía en una amplia gama de climas, debido a su capacidad de reaccionar eficazmente a los cambios de temperatura.
Gracias al hidrogel, la mezcla líquida se volvería opaca cuando se expone al calor, bloqueando así la entrada de la luz solar, y, cuando se enfría, vuelve a su estado transparente original. Al mismo tiempo, indican sus creadores, que “la alta capacidad del agua para retener calor permite que se almacene en ella una gran cantidad de energía térmica en vez de que esta se transfiera a través del cristal hacia el interior del edificio durante un día caluroso. El calor almacenado por el agua se libera gradualmente durante la noche”.
Con el objetivo de comprobar el funcionamiento del sistema, el equipo de investigadores realizó pruebas en algunos ambientes cálidos como Singapur y la ciudad china de Cantón; y en otros fríos, como en Pekín. En Singapur, se constató que durante la hora más calurosa del día (a mediodía), la ventana inteligente líquida tenía una temperatura considerablemente más baja que la de una ventana de vidrio normal. En Pekín, en cambio, se corroboró que la habitación que utilizaba la ventana líquida inteligente consumía un 11 por ciento menos de energía para mantener la misma temperatura que una habitación provista de ventana de vidrio normal. En cuanto a las pruebas de insonorización, estas sugieren que la ventana líquida inteligente reduce el ruido más eficazmente que las ventanas de doble vidrio.
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https://noticiasdelaciencia.com
www.ntu.edu.sg/Pages/home.aspx