La House W se encuentra en Nakafurano, Hokkaido, Japón. La casa está situada en el sitio de un antiguo granero y está rodeada de arrozales y campos de espárragos, por lo que se inspira en este entorno.
Fuente: EcoInventos
Florian Busch Architects ha completado House W, una vivienda con estructura de madera ubicada en Nakafurano, Hokkaido, Japón, que se inspira en los tradicionales graneros de la región. Diseñada para una familia que habita en un entorno con climas extremos—inviernos fríos y nevados y veranos cálidos—, la casa ha sido concebida para maximizar la eficiencia energética. Gracias a un sistema de paneles solares y una bomba de calor, produce casi el doble de la energía que consume anualmente.

Diseño energéticamente eficiente
House W incorpora 56 paneles solares fotovoltaicos con una capacidad total de 23 kW, instalados en varias secciones del exterior. Esta envolvente solar, junto con un sistema de baterías para el almacenamiento de energía, permite que la casa funcione de manera autónoma sin depender de la red eléctrica en la mayor parte del año.

Además, está equipada con una bomba de calor conectada a una fuente de agua cercana, lo que mantiene una temperatura estable dentro de la vivienda. Este sistema abastece la calefacción por suelo radiante y proporciona agua caliente para el uso diario de la familia.

La combinación de energía solar y almacenamiento eficiente permite que la casa genere casi el doble de la energía que necesita anualmente. Este excedente podría ser utilizado para alimentar vehículos eléctricos o ser inyectado a la red eléctrica local, contribuyendo a la sostenibilidad de la comunidad.

Estructura inspirada en graneros y diseño flexible
La vivienda está construida en el terreno donde antes se ubicaba un antiguo granero, rodeada de campos de arroz y cultivos de espárragos. Su diseño imita la estructura de un granero dividido en dos volúmenes, conectados por una zona acristalada central. Esta configuración nació como una solución ante restricciones presupuestarias, ya que los propietarios en un inicio consideraron dividir la construcción en fases.

Paradójicamente, según Florian Busch Architects, la idea de separar un volumen grande en múltiples partes surgió de la necesidad inicial de planificar la edificación en etapas. Sin embargo, al final, la residencia principal se completó de una sola vez. Como parte de la estrategia de diseño, se construyó una tercera sección antes de finalizar la casa: un almacén y un taller, lo que permite futuras expansiones sin alterar la estética del conjunto.

Interior amplio y bañado de luz natural
El interior de la casa abarca 163 m², distribuidos en dos plantas con techos altos, espacios abiertos y acabados en madera, lo que proporciona un ambiente acogedor y cálido. Grandes superficies acristaladas permiten la entrada de luz natural y facilitan la ventilación cruzada, reduciendo la necesidad de iluminación artificial y aire acondicionado.

Para mejorar el confort térmico, la vivienda cuenta con láminas ajustables que regulan la exposición solar: en verano bloquean el calor excesivo y en invierno maximizan la ganancia solar para conservar el calor en el interior.

Además de su diseño bioclimático, House W emplea materiales locales y sostenibles, reduciendo su huella de carbono desde la fase de construcción. La madera utilizada proviene de bosques gestionados de manera responsable, y el diseño modular de la estructura minimiza el desperdicio de materiales.

Un modelo de vivienda sostenible y adaptable
House W es un claro ejemplo de cómo la arquitectura tradicional y las tecnologías modernas pueden combinarse para crear viviendas autosuficientes y energéticamente eficientes. La posibilidad de expandir la construcción en el futuro sin alterar su integración con el paisaje la convierte en una solución versátil y sostenible.

Este tipo de viviendas representan una alternativa viable para regiones con climas extremos, donde la optimización del consumo energético y el uso de energías renovables son esenciales para garantizar el confort sin comprometer el medioambiente. House W demuestra que es posible vivir en armonía con la naturaleza, aprovechando los recursos de manera eficiente y reduciendo la dependencia de fuentes de energía convencionales.